¿Sabías que en la antigüedad algunos abuelitos de Nayón (Ecuador) viajaban hasta regiones de Perú para comercializar escobas hechas de materias primas que traían del Noroccidente de Quito? Y muchos tramos a pie y a lomo de burro.

Las historias de los viajes emprendedores de nuestros ancestros son impresionantes.

Don Moisés Anaguano, antiguo morador de San Pedro de El Valle, también relató que cuando era joven encontró un cántaro de barro con chicha, mientras se encontraba en sus labores del arado en una de las antiguas haciendas que existía en San Pedro de El Valle. Al encontrar esto avisaron al dueño de la hacienda quien pensando que podía contener Oro de culturas antiguas, ordenó romper el cántaro sin embargo la sorpresa fue que en lugar de un tesoro, el cántaro contenía un líquido de color marrón que el dueño asumió que era una chicha y en efecto la probó de la cual en indico nunca haber probado una chicha tan dulce y bien conservada. Nadie sabía ¿quién enterró el cántaro ahí?, ¿hace que tiempo?, y ¿Por qué estaba ahí?.

Otros vecinos antiguos de San Pedro de El Valle también relataron como curaban varias enfermedades con diversas hierbas de la zona. Por otro lado pudimos conocer como las parteras ayudaban a las mujeres nativas en su labor de parto tomando en cuenta que en aquel tiempo tenían que trasladarse por chaquiñanes para llegar a los centros poblados y encontrar ayuda. Como otros lugares en el territorio de Nayón el papel de las curanderas era importantísimo para curar el espanto en niños y enfermedades del estómago así como hacer rituales de limpia del mal viento.

Junto al GAD de Nayón, en su labor de rescatar la Memoria Histórica de Nayón junto a antropólogos, investigadores y su gente. En esta Oportunidad visitando el Barrio San Pedro de El Valle y conociendo sus saberes, leyendas, historias y tradiciones.